24 aniversario de las juntas vecinales
Los integrantes de las juntas vecinales no son novatos. La mayoría se formó en las diferentes organizaciones sociales de los barrios, y fueron invitados por la Policía Nacional que, en 1997, estaba inmersa en el proceso de fortalecimiento de los nuevos policías comunitarios.
En esos años los dirigentes iniciaron un arduo trabajo que consistía en promover la organización de las juntas vecinales. Lograron propalarla en poco tiempo: su trabajo principal fue ser el soporte fundamental de la policía. Los vecinos del barrio conocen muy bien lo que pasa en la comunidad, quienes son de ahí , quiénes son los invitados y los desconocidos que un día se aparecen en el barrio. Por eso se convierten en los aliados principales de la policía y logran un verdadero trabajo en equipo que permite una acción mas efectiva. Ellos asumieron un rol protagónico a través de la realización de actividades preventivas , educativas y de reinserción en seguridad ciudadana .
En un inicio no fue fácil mantener viva la organización, y mantenerse en el tiempo tampoco. Esto solo se logró por la constancia de los buenos líderes vecinales y los policías comunitarios.
Todo este esfuerzo rindió sus frutos: poco a poco la sociedad civil fue recobrando confianza en la institución policial que por esos tiempos fue mermada por el terrorismo y el incremento de la delincuencia.
Ahora la organización vecinal sigue más fuerte a nivel nacional, muchos lideres han dejado huella en sus comunidades, y han contribuido a hacer de estos espacios lugares donde se puede vivir con tranquilidad.
Al respecto, Nancy Mejía, del área de Seguridad Ciudadana del IDL, manifiesta: “Siempre hemos pensado que cuando hay una organización fuerte y empoderada , nada podrá quebrarla. Ellos siguen luchando por mantener sus barrios sin violencia”.
Son 24 años de entrega , sacrificio , constancia y solidaridad de miles de hombres y mujeres que conforman las juntas vecinales. En estos años han logrado un respeto y reconocimiento. Les llaman los vigilantes del día y de la noche. No tienen horarios, siempre están ahí para apoyar a los vecinos ante cualquier situación de riesgo que traiga inseguridad a los barrios.
“Los miembros de las juntas vecinales son voluntarios de corazón y por eso desde el IDL queremos rendirles un homenaje por estos 24 años de intenso trabajo. Además, quiero recordar a aquellos dirigentes que fueron parte de esta gran familia y que partieron por la pandemia. Ellos nos dejaron grandes enseñanzas dignas de imitar”, agrega Mejía.