Desvío en la ruta
Un documento de rendición de viáticos presentado por el magistrado del TC José Luis Sardón presenta un elemento peculiar: un gasto por consumo que llama la atención no tanto por el monto, sino más bien por la ubicación del restaurante, a muchos kilómetros de la ruta oficial autorizada por el Estado
El intenso y largo enfrentamiento entre el Ejecutivo y Legislativo, que desembocó hace casi un mes en la disolución del Congreso de mayoría fujimorista, tuvo como uno de sus actores secundarios a una institución que pocos peruanos conocían hasta entonces: la Comisión de Venecia. Como se recuerda, el 15 de agosto de este año, luego de que el Gobierno presentara el proyecto de ley para el adelanto de elecciones generales, el entonces presidente del Congreso, Pedro Olaechea, envió una carta a los miembros de dicha comisión europea para solicitarles su opinión acerca del carácter constitucional del proyecto presentado por el presidente Martín Vizcarra.
En esa misma línea, Rosa Bartra, por entonces presidenta de la Comisión de Constitución del Congreso, manifestó que el grupo de trabajo que presidía esperaría el pronunciamiento de la Comisión de Venecia antes de votar el proyecto del Ejecutivo sobre el adelanto de elecciones. Lo que sucedió luego es conocido: la delegación europea llegó a Lima para presenciar un grotesco debate congresal cargado de insultos y memes conspiranoicos, Bartra y compañía no esperaron el informe anunciado para el 11 de octubre y archivaron el proyecto de Vizcarra. Días después, debido a la denegación de confianza por otro proyecto de ley, los autores de aquel lamentable guion fueron constitucionalmente disueltos.
Por esos días muchos peruanos conocieron también que aquel organismo europeo recibía regularmente visitas oficiales de magistrados del Tribunal Constitucional (TC), quienes asisten a las sesiones que se realizan en Venecia cuatro veces al año. Se supo también que los representantes del TC ante la Comisión son los magistrados José Luis Sardón (como titular) y Eloy Espinosa-Saldaña (como suplente). Este año, en circunstancias normales, ambos deberían haber viajado a Venecia para estar presentes en el plenario de octubre del organismo; sin embargo, el viaje no se realizó porque coincidía con la sesión del TC en la que se discutió la incorporación de Gonzalo Ortiz de Zevallos, primo del expresidente del Congreso -y que finalmente fue rechazada-.
Tanto Sardón como Espinosa-Saldaña registran un amplio historial de visitas oficiales a Italia, financiadas en su totalidad por el Estado. El 24 de febrero del 2017, por ejemplo, una resolución publicada en el Diario El Peruano autorizaba a ambos magistrados a asistir a la 110 Sesión Plenaria de la Comisión de Venecia, que tendría lugar el 9, 10 y 11 de marzo de aquel año. A Espinosa-Saldaña, además, se le autorizaba asistir un día antes a una conferencia en la Escuela Superior de Estudios Jurídicos de la Universidad de Bolonia, a la que había sido invitado.
A estos magistrados, por lo tanto, se les asignó un determinado número de días de licencia con goce de haber: a Sardón de Taboada del 8 al 12, y a Espinosa-Saldaña del 7 al 12 del mismo mes. De acuerdo a los documentos oficiales, los pasajes aéreos le costaron al TC en conjunto S/. 12 261.84. En cuanto a los viáticos, a cada magistrado se le asignó US$ 540 dólares por gasto diario.
A su retorno, como todo funcionario público, cada magistrado tuvo que efectuar su rendición de viáticos. Sardón presentó el suyo poco después de su regreso, el 20 de marzo.
De los S/. 8 815.5 recibidos por parte del TC, de acuerdo al documento, Sardón documentó gastos por el monto de S/. 3 469.56; asimismo, emitió una declaración jurada por gastos no documentados equivalentes a S/. 1 763.00. En total, el magistrado declaró haber gastado en su viaje S/. 5 232.56.
Sin embargo, un punto llama la atención en la rendición de viáticos de aquel viaje. En el último lugar de la lista de gastos, figura un pago de 35 euros en un establecimiento llamado “La Dehesa de Velez”. Una rápida búsqueda por la web arroja que se trata de un local ubicado en el Conjunto Residencial Don Lucio, en Málaga, una provincia costera situada a más de 500 k.m. al sur de Madrid.
La factura de consumo adjuntada en la rendición de viáticos corrobora el dato. La pregunta es: ¿por qué presenta el magistrado una constancia de consumo en un local ubicado a muchos kilómetros de la ruta autorizada por el TC? Si bien no se trata de un monto exorbitante, llama la atención el largo desvío realizado en medio de un viaje oficial, que contempla días con goce de haber. Fuentes del TC consultadas aseguran que no se trataría de la única vez que Sardón realiza un desvío tan pronunciado en su itinerario oficial. El motivo estaría relacionado con visitas a un familiar que vive en la provincia de Málaga.
Las instancias correspondientes deberán determinar si se trata de un hecho puntual o si existen irregularidades repetidas a lo largo del tiempo. Es importante que, al menos en el TC, las cuentas se mantengan siempre claras.
*Foto: Café Viena.
Este Sardón, por la posesión que tiene con sus pronunciamientos siempre ha sido una pieza al servicio de los intereses de la vil miseria que se llama keikorrata fujimori. No sé por qué, al parecer, un buen abogado se someta a esa impresentable y hoy reclusa por LAVADORA DE DINERO ILICITO. Será que recibía sus tapers?
Respecto a esta denuncia, si bien el monto no es significativo pero DELITO ES DELITO, sobre todo hace los gastos en lugares no fijados en la ruta del trabajo que debía hacer y ser repetitivo entonces NO ES DELITO CUALQUIERA. Debe ser sancionado y no pasado por alto. EL O CUALQUIERA DEBE PASAR POR EL MISMO TAMIZ.