En distrito de Puno se oponen a empresa Minsur
Los pobladores de Nuñoa (Melgar – Puno) tienen un dolor de cabecera. El lugar en el que se originan los ríos que alimentan tus tierras ha sido concesionado a la empresa minera Minsur. Esta situación afecta a las seis cabeceras de cuenca de las que ellos dependen.
“El problema que nos agobia son las concesiones mineras en las cabeceras de cuenca. Nosotros, los del sector bajo, somos eminentemente ganaderos. Si van a hacer mina en esas zonas se va a contaminar nuestras aguas y malograr nuestra producción”, señala Roberto Ccori.
La provincia de Melgar en Puno ha sido considerada como la capital ganadera del Perú de acuerdo con la ley 30031, emitida el 5 de junio del 2013. Seis años después sus pobladores luchan por sostener, en los hechos, esta denominación. Nuñoa se divide en dos sectores. En la parte alta se crían alpacas de raza suri y huacayo. En la baja, tienen vacas lecheras que producen hasta 25 litros por día.
En la actualidad, de todo el territorio concesionado, tres mil hectáreas se encuentran en etapa de exploración: Acumulación Nuñoa (2,898 hectáreas) y Nuñoa 10 (300 hectáreas). El Estudio de Impacto Ambiental (EIA) fue aprobado el 2015. Dentro del área concesionada se encuentra una laguna con una extensión de ocho hectáreas.
Ccori denuncia que nunca se realizó una consulta previa en su distrito y que solo se han efectuado talleres con los dueños de los terrenos en los que se piensa hacer la explotación, sin tomar en cuenta que la población afectada es toda la que depende de las cabeceras de cuenca.
El temor de los pobladores de Nuñoa tiene fundamento. La expresa Minsur tiene tres procesos administrativos sancionadores, debido a que no declararon los pasivos ambientales en su proyecto.
Roberto Ccori se dedica a la cría de ganado. Tiene 25 años y es un joven dirigente de las rondas campesinas y del Comité de Pueblos Originarios en Defensa de los Recursos Naturales y del Medio Ambiente. Dice que de ninguna manera van a permitir que la mina se establezca en su zona.
“Nos estamos organizando las comunidades Orurillo, Nuñoa y Asillo para evitar que este proyecto minero avance. Nosotros nos oponemos porque toda esa agua de las cabeceras de cuenca pasan por nuestras comunidades y va a malograr nuestra producción agropecuaria”, explica Ccori.
Se debería trabajar para independizarse del Perú a fin de Lima como departamento administre lo único que tiene. Pero es necesario que la población cuestione y procese a sus representantes que se amañan con el poder y las empresas en perjuicio de la población.