Nada serenos: Congreso aprueba uso de armas “no letales” para Serenazgo
Aldo Pecho Gonzáles
IDL-Seguridad ciudadana
Hace unos días, el Congreso de la República aprobó por insistencia una ley que autoriza el uso de armas “no letales”, ahora eufemísticamente denominadas “medios de defensa”, como herramientas de lucha contra la inseguridad para el Serenazgo Municipal. La controvertida norma tuvo observaciones por parte del Gobierno —lo que es mucho decir—, pese a lo cual el Congreso decidió llevar a cabo su aprobación. ¿Qué tiene de controvertido autorizar el uso de armas “no letales” en el Serenazgo Municipal? ¿En verdad se han introducido nuevos cambios con esta ley, o qué peligros puede acarrear a futuro?
Para diversos especialistas, resulta contraproducente que los serenos municipales puedan hacer uso de armas “no letales”. Analicemos por qué. En primer lugar, porque el Serenazgo tiene como finalidad, según la propia Ley del Servicio del Serenazgo Municipal, participar en “acciones preventivas y disuasivas del servicio de seguridad ciudadana y en apoyo al cumplimiento de las disposiciones municipales”. A diferencia de la Policía, el Serenazgo no tiene como función combatir el delito propiamente; no se enfrenta ni está capacitado para luchar contra la delincuencia. Alentar al uso de armas “no letales” es desconocer la naturaleza del sereno como actor de la seguridad ciudadana.
En segundo lugar, el uso de armas “no letales” contemplaría un doble riesgo: i) para los serenos mismos, por la posibilidad de convertirse en nuevos blancos de ataque por parte de delincuentes que los considerarían directamente como sus antagonistas, a nivel de la Policía; ii) para la ciudadanía, puesto que los serenos en realidad están en constante interacción con las personas en las vías públicas, y no son pocas las denuncias de abuso que tiene sin que porten necesariamente este tipo de armas. Resulta complicado imaginar qué escenario se abriría si se autorizan más bien “medios de defensa” a un Serenazgo poco preparado y bajo escaso control.
En tercer lugar, ya se han levantado diversas voces municipales en contra de la medida, tanto en las anteriores gestiones, como en las actuales. No hay mejor actor autorizado para temas de prevención relacionados con el Serenazgo que las propias municipalidades, puesto que se encuentra supeditado a las estrategias que estas entidades trazan en torno a labores de seguridad ciudadana. Al respecto, IDL-Seguridad Ciudadana ha realizado —como parte de sus informes anuales de seguridad ciudadana— consultas a las cincuenta (50) municipalidades de Lima y Callao sobre si están de acuerdo con dotar de armas “no letales” a los serenos. El debate sigue presente con opiniones divididas, como puede encontrarse en el siguiente cuadro, en el que se le consultó tanto a las actuales gestiones (2023-2026) como a las salientes (2019-2022).
Gráfico 1
Municipalidades de Lima y Callao: ¿está de acuerdo con dotar de armas no letales a los serenos?
Fuente: consulta a municipalidades de Lima y Callao (IDL, 2022, 2023)
Elaboración propia.
Y, por último, en cuarto lugar, los tipos de armas “defensivas” que permitirá la nueva ley no son de uso novedoso para las municipalidades. Según la propuesta aprobada por el Congreso, los serenos podrán usar elementos como “grilletes de seguridad, escudos, bastones tonfa, aerosoles de pimienta y chalecos antibalas para el cumplimiento de sus funciones”. No obstante, como recogió El Comercio en una reciente nota, muchas municipalidades ya han venido usando estos implementos, que no estaban prohibidos por ninguna ley. La única novedad es que esta vez a los serenos se les autoriza su uso expresamente.
¿Qué riesgo entonces tiene la aprobación de una ley que finalmente no autorizó el uso de armas abiertamente peligrosas como balas de goma o pistolas eléctricas? Por el momento, se ha frenado el mayor peligro al impedir la autorización de objetos que pueden poner en riesgo la vida de cualquier ciudadano. Esto gracias a la intervención de diversas voces de protesta que hicieron retroceder una propuesta demagógica, para nada técnica y que desvirtuaba la labor del Serenazgo. Sin embargo, ha abierto las puertas a la introducción de paulatinos cambios sobre el tipo de instrumentos que usarán los serenos a futuro. No será para nada sorpresivo que una nueva propuesta del Congreso, con la ampliación de estas armas “no letales”, llegue lo más pronto posible. Y sobre ello estaremos en alerta.